Es una realidad que gran parte de la población mexicana sufre de una mala alimentación, por lo que uno de los factores que ha contribuido en nuestro país para tener un número de mortalidad mayor a los de otros países afectados por el nuevo coronavirus que ocasiona la enfermedad del COVID-19 es la obesidad que se encuentra asociada gravemente con problemas de diabetes. De acuerdo a los científicos y expertos en la materia es más probable que una persona con diabetes tenga obesidad, hipertensión, dislipidemias y/o enfermedad renal crónica, la cual constituye a esta consecuencia final.
Si bien nosotros desde hace algunos años ya enfrentábamos una epidemia nacional que es la de sobrepeso y obesidad en niños y adultos ocupando los primeros lugares a nivel mundial de esta problemática de salud que no se ha erradicar aun con las múltiples campañas de difusión que se han hecho a lo largo y ancho del territorio nacional. Tan solo el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado anuncio que los hábitos alimenticios poco saludables y la falta de ejercicio ocasionan el 32% de las muertes en mujeres y el 20% de hombres en el país.
“Durante esta cuarentena por COVID-19 todos nos encontramos en una temporada de aislamiento en casa, por lo que el hecho de cambiar el estilo de vida tan drásticamente nos pudiera poner en riesgo de empezar a consumir alimentos que no puedan ser tan saludables para nuestra salud y los podemos identificar como aquellos que son ultra procesados, o al no tener tanta disponibilidad de alimentos frescos, frutas, verduras o algunos cereales integrales se puede tener un impacto bastante importante en nuestro estado de nutrición de la población,” anunció en entrevista para la Revista Notiexpos y Congresos el licenciado en nutrición Héctor Infanzón, coordinador de Comunicación y Difusión de la Asociación Mexicana de Nutriología A.C (AMENAC)
Entonces una de las cuestiones importantes a considerar es el ritmo de vida que cada persona ha adaptado y se ha visto interrumpida al estar en aislamiento, por lo tanto se tiene un cambio significativamente grande en la alimentación y actividad física por la poca movilidad que se adquiere, viéndose afectado nuestro estado nutricio principalmente y ponernos en riesgo de desarrollar sobrepeso u obesidad.
Ante esta situación el especialista en nutrición Héctor Infanzón no menciona unas opciones ideales para consumir durante esta época de pandemia en nuestro país que son los alimentos frescos, las frutas, verduras, los granos integrales, las leguminosas y semillas. “Si bien tenemos la fortuna en México de contar con una gran variedad de estos alimentos y poder conseguirlos en establecimientos que afortunadamente siguen abiertos e incluso en las cadenas grandes de supermercados y si compramos todos estos alimentos también se cuida la economía, por lo que debemos de quitarnos la idea de que comer sano es caro y muchas veces se gasta más al pedir un servicio de comida a domicilio o en las tiendas de conveniencia donde venden alimentos ultraprocesados”
Otro de los puntos importantes a la hora de pensar en alimentos es realizar una planificación, es decir antes de acudir al supermercado, es ideal realizar una lista de lo que se necesitara y no se debe caer en comprar de más porque entonces podemos estar favoreciendo que haya un desabasto. Todos necesitamos de los alimentos en esta temporada y que mejor manera de estar realizando menús saludables que faciliten la compra.
“En caso de no querer exponerse al momento de hacer las compras de alimentos frescos, en la actualidad se pueden realizar a través de una llamada telefónica o por Internet, por lo tanto si está en nuestras posibilidades podemos hacer uso de estas herramientas, de tal forma que sigamos manteniendo este distanciamiento social y respetando la sana distancia,” nos explica el nutriólogo Infanzón.
