De importancia la ayuda médica, el respaldo de familiares, amigos, grupos de apoyo; además de un programa de tratamiento organizado para superar la adicción a las drogas
Como se sabe la adicción a las drogas, también llamada “trastorno por consumo de sustancias”, puede causar consecuencias graves a largo plazo, esto es problemas con la salud física y mental, las relaciones, el empleo y la ley.
De ahí la necesidad de contar con la información relevante que permita detectar cuando se está ante la presencia de un adicto y saber cómo ayudarlo. Con motivo del Día Internacional contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas, este 26 de junio, especialistas de Mayo Clinic revisan una serie de puntos a considerar para un adecuado manejo de cualquier adicción.
El primer paso a seguir es reconocer los síntomas o las conductas de la dependencia en familiares, amigos y colegas. Cuando se trata de un adolescente, es difícil diferenciar el mal humor o la angustia normales de su edad, de los signos del consumo.
Se explicó que cuando una persona está usando drogas por lo general tiene problemas en la escuela o en el trabajo, debido a las ausencias frecuentes, desinterés repentino en las actividades, notas más bajas o disminución del desempeño.
Se citó también los problemas de salud física como la falta de energía y motivación; así como el aspecto descuidado ante la falta de interés en la ropa, el aseo personal o la apariencia.
Otro punto a considerar son los cambios de conducta, es decir esfuerzos exagerados por prohibirles a los familiares la entrada a su habitación o ser reservado/a con respecto a dónde va con sus amigos; o en su defecto cambios radicales de conducta y en las relaciones con familiares y amigos.
Destacan también los pedidos repentinos de dinero sin explicación razonable; o descubrir que falta dinero o que lo han robado, o han desaparecido objetos de la casa, lo que indica que probablemente los hayan vendido para sustentar su vicio.
Asimismo, se destacó que los signos de consumo o intoxicación en una persona varían de acuerdo al tipo de sustancia. Sin embargo, los más recurrentes son: Euforia, exaltación o sensación exagerada de bienestar; Paranoia, ideas delirantes y alucinaciones; Pupilas dilatadas o contraídas, ojos rojos, Movimientos involuntarios de los ojos (nistagmo); Cambios de conducta o estado de ánimo, irritabilidad, impulsividad, depresión; Afectación en los sentidos: percepción más intenta o alterada; Agitación, mayor energía, apetito y deseo sexual; Problemas de atención, concentración y memoria. Coordinación y movimiento deficiente o involuntario; Evidencias en el cuerpo: marcas de agujas, piel dañada alrededor de la nariz; Desinhibición, juicio deficiente, inconciencia; Somnolencia e insomnio.
Es importante recordar, se indicó, que los adictos no pueden controlarse frente a la droga y es probable que continúen usándola, debido a que sienten un deseo intenso e incontrolable de consumir, razón por la que la mayoría de las personas necesitan ayuda para dejar el vicio, porque no pueden hacerlo por sí solas. Por lo general, niegan que tienen un problema y se muestran reacias a buscar tratamiento.
Finalmente, se reiteró la importancia de la ayuda médica, así como el respaldo de familiares, amigos, grupos de apoyo; además de un programa de tratamiento organizado para superar la adicción a las drogas y mantenerse alejado de ellas.
